Peores ideas de playa

Uno de los planes estrella del verano es ir a la playa (o la piscina) a pasar el día. Y eso muchas veces implica llevar comida.

Hoy voy a darte consejos para que no salgas de la playa con una intoxicación alimentaría por no haber prevenido.

  1. Qué son las toxiinfecciones alimentarias
  2. Cómo prevenir una toxiinfección
  3. Mejores opciones para llevar a la playa
  4. Peores opciones para llevar a la playa

Post de Garazi Lizarraga, @garazilizarraga.nutri

Aunque aún no se haya establecido que la causa de los casos de botulismo que aparecieron la semana pasada sea el haber consumido tortilla fresca envasada, todo apunta a que sí. Es cierto, que el riesgo 0 no existe, pero si que hay una serie de cosas que podemos hacer para prevenir este tipo de casos.

Tortilla de patata

Qué son las intoxicaciones alimentarias

Las toxiinfecciones alimentarias son aquellas enfermedades que se producen por ingerir alimentos que tienen gérmenes patógenos o toxinas.

Estos procesos están causados por la ingestión de distintas bacterias y sus toxinas, por virus o por parásitos. Así, la enfermedad puede tener su origen en la ingestión de bacterias o virus vehiculados en el alimento, de toxinas producidas por aquellas previamente formadas en el alimento, o por formas parasitarias en fases concretas de su ciclo evolutivo.

La eficacia de los controles sanitarios que se llevan a cabo en la producción de alimentos está demostrada, al igual que sabemos que muchas veces, el error viene cuando el consumidor entra en juego y no sigue las recomendaciones de conservación o preparación del producto.

Cómo prevenir una toxiinfección alimentaria

Antes de nada, debemos saber que no podemos saber si un alimento está contaminada a simple vista. Anqué un alimento aparentemente este bien, puede que no lo este.

Un microorganismo necesita unas condiciones favorables para vivir y reproducir. Necesita nutrientes, necesita una temperatura adecuada, un entorno no agresivo (condiciones de acidez, salinidad, humedad). Con estas condiciones favorables, si le concedemos el tiempo necesario, se reproducirá pudiendo alcanzar dosis infectivas.

Justamente en verano es cuando los microorganismos pueden tener las mejores condiciones, y es por eso que en esta época debemos extremas las precauciones. Aunque este punto de para hacer otro post entero, te dejo algunas recomendaciones:

  • Cocina bien los alimentos. Lo ideal es llegar a los 70ºC en el centro del alimento.
  • Consume los alimentos inmediatamente después de cocinar. Evita dejar los alimentos a temperatura ambiente si no lo vas a comer en el momento. En ese caso, es mejor refrigerarlo.
  • Conserva correctamente los alimentos cocinados. Al contrario de lo que piensa mucha gente, es mejor meter directamente al frigorífico algo que hemos preparado y que aún esta caliente, que esperar que se enfrie. Ya que en ese intervalo de tiempo es cuando mayor probabilidad hay de que se contamine, y se prolifere el microorganismo.
  • Calentar bien los alimentos cocinados.
  • Evita el contacto entre crudos y cocinados.
  • Antes de manipular cualquier alimento límpiate las manos.

Peores opciones para llevar a la playa

Teniendo en cuenta todo lo que hemos comentado hasta ahora, vamos a ver cuáles son las peores opciones para llevar a la playa:

  • Bocadillo de pechuga y pimientos
  • Tortilla de patatas
  • Gazpacho
  • Ensalada de pasta
  • Macedonia de frutas
  • Salpicón de marisco
  • Ensaladilla rusa

Es decir, ninguna opción que necesite refrigeración es buena opción, a no ser claro que lleves una nevera portátil.

Mejores opciones para llevar a la playa

Como hemos visto, es fundamental que no rompas la cadena de frio, y para ello, sí o sí, necesitas llevar una nevera portátil como el que aparece en la imagen de abajo por ejemplo.

Pero si en estos momentos no dispones de uno, y hoy mismo tienes intención de pasar la tarde en la playa puedes llevarte:

  • Frutos secos
  • Tortitas de arroz, maíz, etc.
  • Fruta deshidratada

Como ves son opciones que no necesitan refrigeración para conservar. Las conservas de legumbre o de verdura, también pueden ser opciones más seguras, aunque como he mencionado al principio, el riesgo 0 no existe.

Si te interesa este tema y quieres saber más, te recomiendo el libro de Beatriz Robles (Dietista-Nutricionista y tecnóloga de alimentos) titulado Come seguro comiendo de todo.