Hoy vengo a hablarte de la microbiota, de las mentiras sobre la microbiota. Este post no es para contarte lo que es la microbiota humana, sino para contarte todo el negocio que hay montado alrededor.
Post escrito por Eli Gallego, @elidietista.
1.Suplementos para mejorar la microbiota
Si hace tiempo que me conoces ya sabes que no soy de quedarme calladita. Ver cómo te engañan y cómo te marean me cabrea… y mucho.
Supongo que tengo sesgo, al fin y al cabo, las personas que acuden a mí no vienen a cambiar sus hábitos de alimentación porque sí, sino que necesitan hacerlo porque están fastidiadas.
Cuando estás jodida/o (hablando mal y pronto), cuando has probado de todo o casi de todo y estás mal, cuando el malestar condiciona tu día a día, cuando tu calidad de vida merma, cuando rebotas de médico en médico, de especialista en especialista y te dicen:
“tienes problemas digestivos por estrés o ansiedad” o “tienes problemas digestivos por los nervios, es el estrés, no te pasa nada”…
Pero tú no estás bien…
Cuando las personas que tienen tu salud en sus manos no te atienden como mereces (por el tema que sea, ahí no entramos porque es otro melón): TE AGARRAS A UN CLAVO ARDIENDO.
Y ese clavo suele ser gente dispuesta sacar tajada de todo. Gente que parece que sabe más que los demás pero… sinceramente, después de muchas vueltas he llegado a la conclusión de que el problema es que saben poquito, que se quedan en la superficie, que ven las cosas muy por encima y una vez más, tiene razón el siguiente dicho:
LA IGNORANCIA ES LA MADRE DEL ATREVIMIENTO.
Siempre habrá gente espabilada esperando sacar tajada de la que está desesperada. Si te viene fulanita y te dice que lo que a ti te pasa es tu microbiota o que tu bazo está lento y perezoso, o que tu intestino esta así o asao y que tomando estos suplementos para mejorar la microbiota intestinal te curas…

Tú te lo comes con patatas y te crees lo que te digan. Al fin y al cabo no tienes nada que perder (excepto tu dinero).
2. Quién puede hacer dietas
Lo primero de todo y antes de entrar en materia: hablemos de competencias. ¿Le has preguntado alguna vez a tu “asesor” de nutrición que estudios tiene? ¿o a tu psicoterapeuta o coach si es psicóloga?
Si te responde con un soy noseque con “master en alimentación o nutrición” o “especialista en alimentación o nutrición”: esa persona no tiene competencia legal pera asesorarte, para ponerte ninguna dieta.
Si terminas peor que al inicio del tratamiento no pasará nada porque legalmente no te puede asesorar en nutrición… Por tanto, te recomiendo que si es tu caso: dudes, desconfíes y huyas.
Lo que te tiene que decir es que es DIETISTA-NUTRICIONISTA (DN) o TECNICO SUPERIOR EN DIETETICA (TSD), con los títulos de especialista o los másteres que quiera, pero de base, DIETISTA NUTRICIONISTA O TSD. Ni técnico dietista, ni especialista en dietética ni porras en vinagre.
En este otro post te contábamos las funciones de un dietista-nutricionista.

¡Ya esta bien! Que hay de todo, como en botica, y hay muchos con titulación homologada que también te la pueden meter doblada, pero eso ya es porque gente aprovechada hay en todas partes, ya que pagas… ¡¡¡al menos, filtra!!!
Si vas al “asesor dental” en vez de al dentista y te hace una escabechina y te quejas… ¡se reirá hasta el apuntador!. Si vas al coach motivador en vez de a la psicóloga… pues más de lo mismo. Y eso de: yo hablo con no sé quien y me sirve de terapia tampoco vale.
A nadie se le ocurre ir a un profesional que lee mucho de medicina y cirugía y se deja operar una pierna… Para eso si aplicamos la lógica, pero por lo visto para cosas tan importantes como la alimentación, la nutrición, el efecto del alimento en nuestro cuerpo… eso ya nos da igual. Como todos comemos… todos sabemos de comer.
De 10 pacientes que acuden a mi consulta 1 viene rebotado de la consulta de un supuesto nutricionista que en realidad es fisioterapeuta PNI (psiconeuroinmunología). ¡Ale! Ya lo he dicho.
Y como lo de echar balones fuera no va conmigo, SI, hay que decir que también hay muchos dietistas-nutricionistas y TSD que solo leen los títulos de los artículos (o eso parece por lo que predican). Hay compañeros y compañeras que hace tiempo que no leen un artículo científico completo (si es que acaso los leyeron alguna vez) y…
¡Oye! Que nadie les obliga, pero si quieren abarcar todo tipo de situaciones y competencias nutricionales, van a tener que actualizarse y ponerse las pilas… Estamos jugando con la salud de la gente y no basta con leer el titulo del articulo y las conclusiones, hay que desmembrarlos y ver como están hechos.
Hay muchos artículos científicos publicados en revistas buenas con metodologías de mierda… (¡oh! ¡Que sorpresa!… nótese la ironía).

Estamos en una posición poderosa. Cada vez es mas conocido el poder de la alimentación en el mantenimiento y mejora de la salud y en la enfermedad. Conocemos estrategias nutricionales especificas para ayudar a este u otro problema de salud.
Pero, nos hacemos flaco favor si nos dejamos embelesar por lo que dice este o aquel nutriinfluencer sin contrastar la información. Seamos críticos, ya que, de lo contrario, no seremos capaces de ayudar y difundir sino de… CONFUNDIR.
Bueno pues, una vez que he soltado el discursito, vamos al lio.
3.Microbiota y dieta baja en FODMAPS
La santa microbiota intestinal y la santa dieta baja en FODMAP, que por lo visto vale para un roto y un descosido. Ambas me traen por la calle de la amargura porque generalmente venís a consulta habiendo leído, oído, me han contado, me han dicho…
Y perdemos mucho tiempo explicando conceptos. Como pretendo que el post de este miércoles sea puramente divulgativo y no me quiero liar como las persianas, para saber más sobre la dieta baja en FODMAP tienes este otro post.
Voy a ir al grano de las cosas que mas oigo en consulta y que son mentiras podridas épicas y muy habituales, y que os hacen mucho daño.

4.Los test de intolerancias alimentarias
Los test de intolerancias alimentarias no valen una mierda (ale, ya lo he dicho). Salvando algunos (como los de aire espirado para SIBO), pocos sirven para mucho más.
Eso de “es que me sientan mal los alimentos me voy a hacer un test” es un sacacuartos. Me da igual que te lo hayan hecho previa extracción sanguínea o te lo haya hecho un medico de prestigio (que parece que como hablamos de sangre, es más válido, más serio… y no: es la misma mierda).
Te dejo aquí un enlace de la sociedad andaluza de patologías digestivas al respecto: https://www.sapd.es/revista/2018/41/6/01
5. Test de microbiota intestinal
Pues mira, la idea es buena y sería súper útil si supiéramos qué hacer con él. Creo que a largo plazo podrá ser de gran utilidad, pero no de momento.
¿Por qué los test de microbiota intestinal no sirven de mucho actualmente?
Pues porque, aunque sepamos que este u otro microorganismo tienen esta u otra función en tu organismo, no es tan simple como tomar lo que te falta.
La santa microbiota… Pues sí: es la bomba y está implicada en todo. Pena que de momento, no sepamos cómo usar este dato aunque intentemos explotarlo al máximo y venderte de todo.
Lo primero de todo es que no conocemos cual es la microbiota óptima para cada persona, pero es que además, incluso sabiendo que te falta de este bichito o que tienes muchos de este otro, no sabemos cómo mejorar la microbiota intestinal de forma permanente.
¿Es antes el huevo o la gallina?

¿Tienes esta enfermedad porque tienes esta microbiota o es esta microbiota la que te ha llevado a esta enfermedad? Pues ni idea. No lo sabemos.
Pero, ¿es cierto que la microbiota es como si fuera tu huella dactilar? Pues básicamente sí porque es única para ti, pero tu huella dactilar no cambia y los microorganismos que te habitan sí. Es cambiante y evoluciona… ¿y cual es la versión buena o la microbiota normal? Nadie lo sabe.
Por tanto, vuelvo a decir: no es tan simple. Tomar probióticos debería ser una ayuda más, solo en el caso en que este demostrado que puede ayudar de alguna manera (que haberlas, haylas).
Pero tomar por tomar, pensando que te harán bien sin saber cuáles estás tomando es tan rentable como abrir el grifo y dejar el agua correr.
Sí se sabe que hay algunas cepas que pueden ayudar en la mejora de algunas situaciones gastrointestinales como por ejemplo en casos de enfermedad inflamatoria intestinal, pero… ALGUNAS CEPAS, EN ALGUNOS SUJETOS QUE CUMPLEN “X” REQUISITOS.

Lo de tomar probióticos por sistema tengas lo que tengas es una chorrada y es lo último que deberías probar (y siempre con asesoramiento, claro, que no sirven todos para todo y para todos…). Que por cierto, ¡¡¡baratos no son!!!
6.El intestino es nuestro segundo cerebro
Debemos coger esta información con pinzas. El mensaje es bonito y tal, vende mucho (a la vista está), pero va a ser que no. Que están súper relacionados no cabe duda. Sí, por supuestísimo.
Tenemos un nervio (vago) que une coco y culo, es así, no lo discuto. Que algunas personas tienen hipersensibilidad visceral, sí, también… pero es que creo que una vez más se ha usado esto fuera de contexto y ha dado lugar a barbaridades varias… como la del siguiente punto.
7.La serotonina intestinal: la clave de la felicidad

No sé ni como dar pie a lo que te quiero contar aquí. Lo que ocurre a nivel intestinal puede tener (y tiene) muchas implicaciones extradigestivas. Pero, desde luego, una intervención nutricional, por mucho que mejore tu intestino y module tu microbiota, no va a curar una depresión, ni va a hacer que dejes de tener ansiedad y por favor, no va a curar un autismo.
No cabe duda de que cuando te duele algo, estamos anímicamente mas decaídos, pero esto no es porque secretes menos serotonina y que esta no te llegue al cerebro. Es porque cuando uno no esta bien físicamente, anímicamente tampoco lo está. La gestión del dolor también puede trabajarse en terapia psicológica.
Está claro que hay una relación cuerpo-mente, eso es indiscutible. Afirmar que modificando tu alimentación, mejoramos tu microbiota y que si conseguimos que esta produzca más serotonina vas a ser más feliz, además de ser una mentira enorme, es una irresponsabilidad.
La serotonina que se produce a nivel intestinal NO ATRAVIESA LA BARRERA HEMATOENCEFÁLICA, así que es imposible que tenga efecto directo a este nivel.
8. Tienes problemas digestivos por nervios
Claro. Claro que tengo nervios porque no soy una anguila, pero además de eso tengo dolor. Fuera bromas, la hipersensibilidad visceral existe y es el motivo por el que muchas personas que sufren el síndrome de intestino irritable están realmente desesperadas.
Cuando se descarta que hay algo orgánico, cuando se cumplen algunos requisitos y finalmente se llega al diagnóstico de intestino irritable es común que cualquier “movimiento” intestinal se interprete como “dolor” debido a una excesiva sensibilidad de los receptores del dolor.
El saber que no está en tu cabeza no va a hacer que te duela menos, pero al menos te hará dejar de pensar que está sólo en tu cabeza. Sí yo te creo que te duele, aunque no haya aparentemente nada funcional que lo cause.

9.La dieta baja en FODMAP es la solución para cualquier disfunción gastro-intestinal
Pues la solución así porque sí no va a ser. Es cierto que precisamente por lo que acabamos de contar en el punto anterior, puede ayudar y mucho en este síndrome de intestino irritable.
Si conseguimos que el intestino se distienda menos reduciendo la cantidad de gas que las bacterias pueden producir, dolerá menos…
Además, hay que tener en cuenta que este gas (dependiendo del tipo de gas que se produzca, que a su vez dependerá de qué bacterias fermenten estas u otras fibras) en ocasiones puede enlentecer los movimientos peristálticos e incluso producir irritación. Pero… hay muchos peros y hay que tener en cuenta que la dieta baja en FODMAP:
- No es fácil de hacer, y que si no es necesaria también te puede perjudicar y perjudicar a TU MICROBIOTA. ¡Anda! ¿Esto no lo esperabas eh? ¡Pues si! Si reduces la fibra prebiótica (el alimento de los bichillos) = si las matas de hambre…. ¿Qué esperas? Hay que valorar si es mejor hacerla que no hacerla y sobre todo… hacerla bien pautada (tiempo, fases, como estás, qué alimentos sí y cuáles no… etc.)
- No siempre es el momento de hacerla: Puedes hacer una dieta muy baja en FODMAP, pero si tu nivel de estrés es alto o la propia restricción te produce ansiedad y no tienes ayuda psicológica te ayudará lo mismo que hacer el pino con una mano (nada).
Y… podría seguir hasta el infinito y más allá porque una vez que cojo carrerilla no hay quién me pare. Sé que a nadie nos gustan las “bofetadas” de realidad, pero así son las cosas.
Ya ves que no vengo a venderte nada. LA SALUD ES LO PRIMERO Y LA COSA NO ES VENDER.

A ti, como usuari@ de los servicios de nutrición, te digo que no te dejes engañar. Que exijas titulación del mismo modo que se lo exiges a otro profesional sanitario en su consulta. Y que no te creas todo lo que lees.
¡Que no es mejor profesional quien mas llena tiene la agenda, probablemente quien tenga la agenda tan tan llena será que es buen vendedor!
Gracias por confiar en los profesionales de la nutrición, gracias por entender la importancia de la alimentación en la mejora de tu salud. Gracias por valorarnos. Seguiremos buscando estudios, leyendo, informándonos y formándonos para intentar que la información que te llegue sea lo más veraz posible.
Y, como no, para conseguir tener una buena base para poder adaptar los consejos generales a tus necesidades individuales, personalizando cada consejo nutricional que te ofrecemos.