Hoy vengo a contarte qué es la gordofobia y por qué es tan importante visibilizarla.
Post escrito por Jone Larrañaga, @jonelarra.nutri.
Te cuento los siguiente:
- Gordofobia: ¿qué es?
- La obesidad y su estigma
- La gordofobia es social
- Mensajes que aumentan la discriminación e insatisfacción
- ¿La persona gorda lo es porque quiere?
- La excusa de la salud para esconder la gordofobia
- Criticar la gordofobia vs. fomentar la obesidad
1. Gordofobia: ¿qué es?
La gordofobia es un concepto que cada vez se escucha más en nuestra sociedad pero que no sé si todas las personas que llegaréis a este post conocéis.
De hecho, si escribes la palabra en la RAE, verás que todavía no se ha incluido en el diccionario.
Pues, tal y como se puede intuir simplemente leyendo la palabra, la gordofobia es el odio, rechazo y violencia que se ejerce hacia las personas gordas por el simple hecho de serlo (Piñeyro, 2020).
En una época que se caracteriza por la excesiva preocupación por la estética corporal (a la que hacía referencia Lucía en este post), los cuerpos y formas que entran dentro del canon establecido son percibidos como exitosos, saludables y disciplinados.
Asimismo, los cuerpos que no entran dentro de esos cánones son percibidos como vagos, feos y enfermos (Quirós, 2019), teniendo la sensación de que merecen ser castigados por ello.

2. La obesidad y su estigma
Las personas con un tejido adiposo mayor o un cuerpo más voluminoso que el que dictan las normas sociales son estigmatizadas. Así, se otorga a tod@s l@s demás el derecho a juzgarlas, ridiculizarlas y repudiarlas.
Uno de los mayores problemas en este tema es que se percibe a la persona gorda como la responsable de no entrar dentro de esos cánones sin tener en cuenta los factores históricos, sociales, personales, anatómicos, genéticos, emocionales e incluso económicos que repercuten en la situación individual.
3. La gordofobia es social
Te invito a reflexionar si te suena haber oído o haber expresado alguna de las siguientes frases:
- “Con la cara tan bonita que tiene, estaría más guapa si adelgazase”. ¿Acaso una persona gorda no puede ser guap@?
- “¿Has pasado una gastroenteritis? Por lo menos te habrá servido para adelgazar”. Ya claro… me prefieres enferma que gord@, ¿no?
- “¡Madre mía! ¿Cómo has adelgazado tanto? ¡Estás guapísim@!” Otro de los mensajes más oídos que relacionan estar guap@ con la delgadez.
- “Mira lo que se está comiendo esa/ese, normal que esté como está”. Y puede haber una persona delgada comiendo exactamente lo mismo o más a su lado, pero la diana de toda crítica será la persona que está gorda.
- “Si quieres adelgazar, come menos y muévete más”. Si fuese tan fácil y con lo que se les hace sufrir a las personas gordas, ¿no crees que tod@s estaríamos delgad@s?
- “Te estás poniendo como una cerda”. ¿Qué se supone que se quiere conseguir con este comentario? Porque si la intención es “ayudar” a esa persona y/o que pare de comer, con la ansiedad que le pueden generar este tipo de comentarios lo más probable es que se consiga el efecto contrario, ¿o no?
- “¡Mira cómo va vestida esa/ese! Se le notan todos los michelines”. Es que, ¿por qué debe disimular o tapar lo que tiene?
- “Deberías adelgazar, te lo digo por tu salud”. Antes de pronunciar esta frase, se debería conocer la salud de la persona, no dar por hecho que por el simple hecho de estar gorda tiene peor salud que otr@s.
- “Estando así, ¿quién se va a fijar en él/ella?” ¿Acaso las personas gordas no merecen ser amadas? ¿Nadie puede sentir atracción por ellas por el simple hecho de tener un mayor volumen corporal?
- Etc, etc, etc…
4. Mensajes que aumentan la discriminación e insatisfacción
Este tipo de mensajes, además de discriminar a la persona que los recibe, pueden generarle inseguridad e insatisfacción corporal.
A su vez, esto mismo puede provocar que esta persona pueda desarrollar problemas tan graves como los TCA.
Garazi te cuenta más sobre este tipo de mensajes que recibimos desde pequeñ@s por parte de los demás y los peligros que pueden acarrear en este otro post.

¿Te has sentido reflejad@ o identificad@ en alguna de esas frases? Por haberlas dicho o haberlas recibido…
Seguramente sí y no es de extrañar, porque la sociedad en la que vivimos es gordofóbica, se trata de una discriminación sistémica y estructural con unos discursos, expresiones y situaciones reproducidas en nuestra cotidianeidad (Piñeyro, 2020), como, por ejemplo:
Se utiliza la palabra “gord@” para descalificar o insultar a alguien…
…cuando la gordura debería ser una cualidad física más como la altura, el color de ojos, color del pelo… ¿Cómo te sentirías si, por ejemplo, tener ojos azules fuese una cualidad odiada en la sociedad, tú los tuvieses y se utilizase ese calificativo para insultar a los demás? No tiene mucho sentido, ¿no?
Las personas gordas sufren más bulling en la escuela por su apariencia física (UNESCO)
Al final, en una clase escolar se reproducen los discursos más arraigados en la sociedad, con lo cual, si el estar gord@ es un motivo de rechazo fuera del aula, también lo será dentro de ella. Con todos los problemas y sufrimiento que acarrea sufrir bulling en la escuela…
Las personas gordas sufren discriminación en el entorno médico/sanitario
En muchas consultas médicas se da por hecho que cualquier afección o dolencia que presenta el/la paciente está relacionada con su gordura.
Así, la mandan a casa sin hacerle las pruebas correspondientes, sin indagar demasiado en el origen de esa afección y sin escuchar a la persona que se tiene enfrente.
La persona puede salir de la consulta con una dieta para bajar de peso (te contamos más sobre distintas dietas en este post) teniendo dolor de oídos.
Así que imagínate cómo se puede sentir esa persona de atendida…
Menor probabilidad de encontrar trabajo
Según varios estudios realizados en distintos países, la gente gorda tiene menos probabilidades de encontrar un empleo que las personas delgadas y, además, sus salarios son más bajos cuando son contratadas.
No tienen representación en los medios de comunicación
Las personas gordas no suelen ser las protagonistas de las películas, ni son presentadores en la TV, ni salen en los anuncios de publicidad (si no es para “hacer de gord@s”).
Incluso cuando se trata de comedias o monólogos, mucha gente gorda suele hacer mofa de su gordura o los chistes son en relación a su gordura.
En definitiva, no suelen tener papeles importantes, ni suelen ser figuras de referencia, ni suelen ser tratad@s con el mismo respeto que a las personas delgadas.
Dificultades para vestirse
L@s gord@s tienen dificultades para algo tan básico como encontrar ropa, y generalmente, la ropa de tallas grandes suele ser mucho más cara. Lucía te cuenta más sobre el tallaje de ropa y la salud mental en este post.

Estos son sólo algunos ejemplos que reflejan que vivimos en una sociedad gordofóbica o gordófoba.
5.¿La persona gorda lo es porque quiere?
¿Crees que sabiendo la discriminación que puede sufrir una persona gorda, escoge serlo?
La realidad es que no nos damos cuenta de que la persona gorda no es gorda porque sea vaga, no es porque no pare de comer, no es porque no tenga fuerza de voluntad…
Aunque se haya empezado a omitir en otros países, en España todavía se pide incluir la foto en el CV, lo que puede aumentar la posibilidad de ser discriminadx por el aspecto físico.
Acaso crees que si fuese tan sencillo estar delgad@, ¿no lo sería todo el mundo?
6. La excusa de la salud para esconder la gordofobia
Muchas veces las personas se escudan en que quieren promover la salud de estas personas gordas cuando se tienen actitudes discriminatorias o de rechazo hacia ellas.

Pero hay muchísima gente que come saludable, que hace ejercicio y se cuida y, aun así, no llegan a estar delgad@s nunca.
En cambio, hay gente que come fatal y que lleva una vida totalmente sedentaria y, aun así, está delgad@.
¿Quién de esos dos dirías que está más saludable?
Con esto me refiero a que no debemos quedarnos en lo puramente superficial y estético para valorar la salud de las personas.
De hecho, lo único que conseguimos con este tipo de comportamientos es perjudicar su salud, tanto física como mental, exponiéndolas a dietas milagro y todo tipo de barbaridades para intentar adelgazar.
Todo ello puede derivar en problemas mentales como los trastornos de la conducta alimentaria, sin olvidarnos de que éstos pueden tener consecuencias fatales para la persona.
7. Criticar la gordofobia vs. fomentar la obesidad
Nadie quiere ser discriminado ni sentir que es rechazad@ por los demás, pero hay multitud de factores que interfieren en que esa persona sea como es y tenga el cuerpo que tiene.
Lo que quiero que quede claro en este post es que cuando las nutricionistas criticamos la gordofobia, no estamos haciendo apología del sobrepeso y obesidad.
No por el hecho de criticar este tipo de estigmatización y esta discriminación social que sufren las personas gordas estamos animando a todo el mundo a ser gordo.
Sabemos que tener un porcentaje de grasa corporal superior puede tener implicaciones negativas para la salud, relacionándose con patologías asociadas como la diabetes, la hipertensión arterial, enfermedades coronarias, algunos tipos de cánceres…
Lo único que queremos reivindicar es que estas personas tienen exactamente el mismo derecho a vivir felices con su cuerpo como las personas delgadas.

Y por supuesto, no deberían estar poniendo en riesgo su salud mental o física por normas y directrices sociales, sometiéndose a infinidad de dietas que no son inocuas, como te contamos en este post.
Si a lo largo de tu vida has sentido este tipo de rechazo, has tenido que oír todo tipo de comentarios desagradables, te has sentido discriminad@ sólo por tu peso… no te lo mereces.
Si ves que ello ha afectado a tu autoestima, Lucia, la psicóloga del centro, estará encantada de ayudarte a sentirte mejor en tu cuerpo, a quererte, mimarte y aceptarte, sea cual sea tu talla.
Y por supuesto, si ves que necesitas o quieres cambiar tus hábitos para estar mejor contigo mism@ y cuidar tu salud mental y física, también estaremos encantadas de ayudarte en ese proceso.
Pero si quieres emprender cualquier cambio… te recomiendo que lo hagas por y para ti, no por los demás ni para que los demás no te juzguen. Ahí empieza realmente la motivación…